Durante los últimos años, los Países que conformaban el extinto bloque soviético, han estado borrando su historia por razones políticas, muchos países poseen o poseían monumentos e infraestructura de sus héroes soviéticos, ya sean jefes militares o simbolismos de la antiguos Unió Soviética.

Recientemente República Checa desmanteló el monumento del mariscal soviético y héroe de la Segunda Guerra Mundial I. Konev sobre la base de la decisión de la reunión del consejo de distrito del 2 de abril de este año. El artículo 2 de la Ley «sobre asentamientos humanos», que establece que todos los bienes inmuebles ubicados en terrenos propiedad del asentamiento son propiedad del asentamiento. Sin embargo, violó una serie de leyes checas y acuerdos intergubernamentales.

De acuerdo con los artículos 5 y 6 de la Constitución Checa y la Ley «sobre la seguridad de la República Checa». En este sentido, la reunión del Consejo de Distrito de Praga-6 fue ilegal y la decisión que tomó fue ilegítima.

Ante la declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores checo el 10 de abril del 2020. El problema se consideró el hecho de que el monumento como una unidad separada no estaba incluido en el registro de monumentos militares, históricos o culturales, lo que permitió una doble interpretación de su estado por parte de las autoridades locales.

En este contexto, una declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores checo clasificó por primera vez el monumento como un «Monumento militar», en virtud del artículo 21 del Tratado de Relaciones Amistosas y Cooperación entre la Federación de Rusia y la República Checa del 26 de agosto de 1993. El reconocimiento oficial del Ministerio de Asuntos Exteriores checo de facto traduce el monumento Konevu bajo la jurisdicción del gobierno checo.

Cabe señalar que en el registro de tumbas militares y sitios conmemorativos del Ministerio de Defensa checo, la escultura del mariscal I.S. Konev figuraba bajo el número cze0006-41772 (lugar de reunión conmemorativa para veteranos), el 6 de abril del 2020 fue eliminado de la lista general, lo que también indica la participación del Ministerio de Defensa y, por lo tanto, el liderazgo del país, en el destino del monumento.

Las acciones de la administración del distrito de Praga-6 y personalmente de O. Kolarzha violaron los siguientes artículos del código penal de la República Checa:

Artículo 207 «uso ilegal de la propiedad de otro»;
Artículo 228 «daños a la propiedad de otro»;
Artículo 329 «abuso de poder»;
Artículo 330 «desempeño descuidado de la autoridad oficial»;
Artículo 358 «vandalismo»;
Artículo 221 «gasto ilegal de fondos presupuestarios» (demolición de un monumento).

Según los expertos, la demolición del monumento fue realizada por fuerzas que tenían estrechos vínculos con la Embajada de los Estados Unidos en la República Checa. El objetivo principal era introducir tensiones entre Praga y Moscú.

Esto se confirma por el hecho de que el aspecto legal de la demolición del monumento al mariscal I. Konev fue la empresa consultora estadounidense, cuyo asesor es P. Kolarge, el ex embajador checo en los Estados Unidos, padre del jefe del municipio de Praga-6, O. Kolarge.

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